Apuntes del Alcázar de Sevilla. Nº 16, 2015 - page 230

228 Apuntes del Alcázar de Sevilla
ANÁLISIS
De la gama de los cinco colores básicos usados en
este tipo de revestimientos, algunos de ellos ofre-
cen una imagen relativamente constante a lo largo
del tiempo. Es el caso del negro (manganeso) o del
melado (hierro) pero otros como el blanco (esta-
ño), el azul (cobalto) y, sobre todo, el verde (cobre)
muestran una enorme variabilidad dependiendo
de los componentes que no siempre eran los mis-
mos ni en su naturaleza ni en proporciones
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.
Ello permite diferenciar, a veces, en un panel,
piezas intrusas aunque cuando el número de
éstas aumenta, surge la duda acerca de cuáles
son las originales y cuáles las repuestas. Pruebas
realizadas con colorímetros, bien programadas,
partiendo inicialmente de los conjuntos de cro-
nología segura, podrían permitir eventualmente
identificar reposiciones.
El número de colores usados en un revestimiento
puede ser indicativo de un correspondiente nivel
de calidad aunque a veces actúan factores econó-
micos que pueden influir en la elección de los co-
lores dado que no todos los óxidos colorantes se
compraban al mismo precio. Por ejemplo, sabe-
mos que el blanco y el azul eran los más costosos
de los cinco, ya que tanto el estaño como el cobal-
to eran productos frecuentemente importados.
Un hecho constatado ha sido que aquellos alicata-
dos que consideramos más antiguos están forma-
dos por mayor número de colores. Por ejemplo,
el Patio de las Doncellas y las jambas del Salón de
Embajadores usan 5 colores más los diferentes to-
nos de reflejo dorado; el dormitorio del rey don
Pedro, 4; la Sala de los Pasos Perdidos y del Techo
de los Reyes Católicos, 4; el dormitorio de los Re-
yes Moros y las salas de los Infantes, 3.
4.2. Variabilidad tonal
Con independencia del número de colores em-
pleados en los zócalos de cada estancia, otro hecho
de fácil comprobación permite diferenciar, al igual
que la exactitud del corte y el ajuste, los alicatados
tradicionales de los industriales. Tal factor es la
nula variabilidad de tonos que ofrece cada color en
el caso de los de fabricación industrial frente a la
gama de tonos que evidencian los fabricados por
procedimiento artesanal, hecho que obligaba al
alarife instalador a evitar en lo posible que se con-
centraran en una zona las piezas de igual tono y a
procurar más bien dispersarlos para evitar el posi-
ble efecto de manchas en el revestimiento.
4.3. Otros indicios
La presencia o ausencia de otros indicios relacio-
nados con los procedimientos de cocción usados
permite a veces identificar grupos de piezas se-
mejantes. Entre los más significativos ya hemos
mencionado la huella del arranque de los trí-
podes separadores de piezas durante la cocción
pero también pueden ser de interés la ausencia
o presencia de manchas provocadas por el goteo
de piezas de vidriados de diferente color al que
muestra el alicer, el grado de vejez de los daños
percibidos, el tipo de brillo y textura que ofrece
la superficie, la presencia o ausencia de poros,
cráteres, arrugas o burbujas de vidriados hervi-
dos por exceso de temperatura o, incluso el tipo
y grado de suciedad acumulada.
5. PUESTA EN OBRA
Las peculiaridades de esta última fase de trabajo
sólo pueden ser percibidas en caso de que el re-
vestimiento sea desmontado de su lugar
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.
Como ya ha sido comentado más arriba, es muy
importante constatar si los aliceres han sido mo-
dificados en sus cantos por el tradicional proce-
dimiento del «escafilado» o si, por el contrario,
el canto inclinado está generado por molde.
La solidez de revestimiento depende de tres ti-
pos de adherencias y en correspondencia de
ellos, de tres tipos de morteros: el que une cada
alicer con sus aliceres vecinos, el de todos los
aliceres para formar un placado y, finalmente, el
que une la placa al muro. Pero también el aná-
lisis de otros métodos empleados para asegurar
la adhesión como, por ejemplo, clavos de hierro
forjado que sujetan el mortero de agarre al muro
de fábrica deben ser analizados por cuanto pue-
den ser reveladores de las tradiciones construc-
tivas de cada momento y lugar
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