122 Apuntes del Alcázar de Sevilla
RESTAURACIÓN
Figura 9a.
Grabado de A. Guesdon con una
vista aérea de Sevilla en la que
puede contemplarse cómo la
Galería del Grutesco cruza los
Jardines del Alcázar, 1852-1865
Figura 9b.
Plano del Alcázar de Sevilla y sus
jardines de J. Fernández, 1872.
Más allá del Jardín de la Alcoba y
toda la parte oriental del Grutesco
todavía eran huertas
De esta época debe ser, aunque no contamos
con confirmación documental, la disposición
del forjado mediante vigas metálicas y bovedillas
de ladrillo a revoltón que encontramos durante
la ejecución de la obra. Según algunos autores,
se trata de una solución constructiva que co-
mienza a utilizarse en Sevilla a partir de 1880
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,
con amplia difusión en la arquitectura regiona-
lista durante el primer cuarto del siglo XX.
En cualquier caso, es evidente que la solución
con viguería metálica no fue acertada, ya que
José María Cabeza —nuevo Director del Al-
cázar a partir de 1990— hubo de sustituir un
año después de su nombramiento el entrama-
do metálico de todo el remate sur de la Gale-
ría, presentando el resto de perfiles un estado
muy degradado cuando se llevó a cabo nuestra
intervención, tal y como podrá observarse en
páginas posteriores.
Es en todo caso la de José María Cabeza la últi-
ma intervención relevante llevada a cabo en la
Galería del Grutesco. En ella, además de repo-
ner el entramado metálico, se ejecutó una nue-
va terraza de cubierta a la andaluza, se renovó
el revoco interior de los muros con mortero
entonado con arena del río Tinto, y se pintó en
azul la cerrajería de protección de los vanos
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—
figura 9—.
El siglo xxi, el Grutesco en el Plan
Especial de Protección
Aún no aprobado de manera definitiva, el Plan
Especial de Protección del sector 6 «Real Alcá-
zar» del Conjunto Histórico de Sevilla supone
una de las referencias más recientes y ajustadas
a la actualidad del palacio. El tomo IV es donde
se recogen las fichas de catalogación, aunque
se da el caso de que el conjunto de la Galería
del Grutesco no viene recogido en una ficha
específica, sino incorporados cada uno de sus
tramos a la ficha de su jardín correspondiente:
el «Jardín del Estanque» y el «Jardín de las Da-
mas».
Por otro lado, en el tomo I se recogen las ac-
tuaciones previstas por el Plan, en donde se
plantea la puesta en valor de todos los inmue-
bles del Real Alcázar. La Actuación 4 propone la
«Apertura al tránsito del adarve de murallas y
cubierta del Palacio Gótico, cuyo objetivo prin-
cipal radica en poner en valor la arquitectura
defensiva palatina para conocimiento público».
En ese sentido, y aunque la cubierta del Grutes-
co no está contemplada dentro de la propuesta
del Plan Especial de Protección, la esencia de la
misma nos recuerda a ese paseadero descubier-
to que Vermondo Resta diseñó pensando en la
llegada de Felipe III, y en cómo debía disfrutar
de las vistas de los jardines y de la ciudad desde
esa privilegiada posición —figura 4—.